Tanto en el caso del envejecimiento normal como el las fases iniciales de la demencia es conveniente llevar a cabo una estimulación cognitiva. El entrenamiento mental es un tipo de intervención que aprovecha los recursos de memoria existentes, favoreciendo su ejercicio, y los preserva mediante el desarrollo de tareas con el fin de retrasar el deterioro
¿A QUIÉN VA DIRIGIDA?
• Personas interesadas en prevenir la pérdida de memoria u otras capacidades intelectuales como consecuencia del envejecimiento o de una menor actividad intelectual como puede ser el caso de la jubilación.
• A aquellas personas que presenten una pérdida de memoria que les dificulte para ser autónomos y que tengan un diagnóstico de demencia en fase inicial o leve.
¿QUÉ OBJETIVOS PERSIGUE?
• Estimular y mantener las capacidades mentales
• Dar seguridad e incrementar la autonomía del paciente
• Evitar la desconexión del entorno y fortalecer las relaciones sociales
• Mejorar la capacidad de vida
METODOLOGÍA
Entendemos que las distintas áreas cognitivas no funcionan por separado, por lo que a la hora de intervenir en una de ellas, como puede ser la memoria, se deben trabajar las demás áreas: lenguaje, atención, percepción,…, siendo así un entrenamiento multifactorial.
• Estimulando las capacidades cognitivas, a través de diferentes ejercicios y potenciando las funciones cognitivas
• Ejercitando la memoria
• Estimulando el lenguaje, la orientación y la atención
• Desarrollando actividades ocupacionales de la vida diaria
Programa de desarrollo cognitivo
Este programa de estimulación de la memoria va dirigido a aquellas personas que presentan una pérdida de memoria y que tienen un diagnóstico de demencia en fase leve y moderada.
El programa de estimulación de la memoria, consta de las siguientes partes:
1. Evaluación. Conocer qué áreas están más conservadas y cuáles más afectadas.
2. Plan de tratamiento. Desarrollar tareas específicas para cada caso, trabajando las distintas funciones cognitivas, intentando dentro del grupo establecer pautas de trabajo lo mas individualizadas posibles
3. Intervención con el paciente. Memoria, orientación, lenguaje, atención, actividades de la vida diaria, cálculo y manejo del dinero, funciones ejecutivas, pensamiento abstracto y escritura.