Las técnicas de lectura en el estudio

La lectura es el proceso inicial sobre el que se asienta cualquier método de estudio. Para poder llevar a cabo un proceso eficaz de estudio, el alumno debe de haber desarrollado las habilidades necesarias en cuanto a fluidez y comprensión lectora necesarias.

En primer lugar tenemos que hacer una lectura completa de todo el epígrafe o texto, para tener una idea general del contenido. Hay que evitar hacer los esquemas, resúmenes o mapas mentales, a la vez que leemos por primera vez el texto. Este es un error muy generalizado que solo nos va a traer problemas de comprensión global del texto y de la colocación y organización de la información en nuestros esquemas.

En esta primera lectura nuestro objetivo es hacernos una idea general del texto. En una segunda lectura subrayamos las palabras claves, tipos, ejemplos etc. que vamos a incluir en nuestro esquema o técnica de estudio escogida (mapas, resúmenes, etc.). Es importante tener una idea clara de cómo tenemos que colocar y sintetizar el contenido de estudio, este proceso nos ayudara a aprovechar el tiempo y a obtener mejores resultados en los exámenes.

Entre las distintas técnicas de lectura para estudiar vamos a destacar:

Lectura silenciosa

Es la más habitual. Se realiza sin pronunciar las palabras. La velocidad y el nivel de comprensión pueden variar en función de la habilidad lectora del estudiante.

Lectura reflexiva

El objetivo es comprender completamente todo el texto. La velocidad de lectura es menos de la que normalmente tenemos en una lectura silenciosa.

Lectura selectiva

La lectura en la que buscamos aspectos concretos de la información del texto. Su velocidad es muy elevada, solo buscamos aquellas palabras clave que nos interesan.

Existen otros tipos de lectura “ultrarápida” que abordare en otro artículo denominado “velocidad lectora”

Miguel Diez García

Psicopedagogo

LESEMAR – técnicas de estudio